Eduardo Chozas Eduardo Chozas a sus 46 años atesora a sus espaldas la experiencia de haber corrido 14 veces la Vuelta a España, 7 el Giro de Italia y 6 el Tour de Francia, además de infinidad de otras competiciones de mayor y menor categoría. Esto le ha reportado un profundo conocimiento acerca del mundo de la bicicleta

¿En su infancia se planteó ya ser ciclista?
No, quería estudiar farmacia porque nunca pensé que podría vivir del ciclismo.

¿En este caso, imaginaba llegar a esta cima?
Cuando jugaba a las chapas y escuchaba el Tour por la radio soñaba con participar algún día, por eso cuando gané la primera etapa en 1985 me pareció un sueño hecho realidad.

De no serlo, ¿a qué se hubiese dedicado?
Posiblemente hubiese hecho Farmacia y no sé...

¿Qué recuerdos le acompañan de su niñez?
Que a los 3 años patinaba y montaba en bicicleta por las aceras atropellando a las clientas de la frutería de mis padres.

¿Echa de menos la competición?
No, porque la competición es muy estresante, te juegas el futuro profesional dependiendo de los resultados.

¿Su mejor momento profesional?
Conseguir en un mismo año la victoria de etapas en el Giro de Italia y en el Tour de Francia.

¿Y el peor?
Cuando no tenía fuerza y el director me decía que dependía de mi la continuidad del equipo.

Bueno, entonces, ¿cómo se ven las cosas desde el otro lado?
Las sigo viendo igual, aunque los tiempos han cambiado en el deporte en general, en la última década han adquirido demasiada importancia los médicos y quizás no sea un buen momento para ser ciclista, el ejemplo es la investigación de la Guardia Civil sobre la trama del dopaje en la Operación Puerto.

Precisamente no podemos obviar hablar del dopaje, ¿qué opina al respecto?
Que existe, ha existido y seguirá existiendo. Porque la trampa, el engaño para conseguir algo está en la mente humana. En el día a día, recurrimos a sustancias que nos ayuden, nos motiven, nos quiten el dolor, .... El alcohol, tabaco, drogas, antidepresivos, tranquilizantes, etc... se usan a diario. El deportista es una prolongación de la sociedad. Aunque con su trabajo y sacrificio vence al placebo.

¿Por qué cree que algunos deportistas se arriesgan al tomar estas sustancias? Porque se juegan a corto plazo su futuro profesional y no miran en el medio plazo o al futuro.

¿Es amor al deporte o al podium?
Es ceguera.

¿Y qué le ha llevado a comprometerse con este deporte a través del Actívate?
El Circuito Actívate va dirigido a fomentar una actividad deportiva divertida basada en la utilización de la bicicleta de montaña, el entorno natural y la amistad. Se trata de enseñar cómo se debe utilizar la bicicleta sin riesgos en grupos de amigos y en familia.

¿En qué consiste concretamente?
Se diseñan 3 recorridos diferentes para que pueda participar desde el menos iniciado hasta los que tienen más práctica. Por ejemplo, en una familia el niño pequeño hace el recorrido más corto de 10 km, la mamá el de 20 km y el papá el de 40 km. Cuando acaban recogen su regalo y avituallamiento y esperan la llegada de todos para la entrega de los regalos del sorteo que se realiza donde hay bicicletas. Es una aventura de 14 domingos desde marzo hasta junio que realizamos todos los años en la que Pozuelo ha entrado desde el año pasado.

¿A quien recomienda practicar el ciclismo?
A todo el mundo, un dato significativo es que en el mismo recorrido pequeño han participado desde niños de 5 años hasta personas de 70 años.

¿Qué consejo darías a los jóvenes deportistas?
Sobre todo que aprendan a disfrutar del ejercicio físico porque ayuda a desarrollarse, a mantener la salud, a conocer chicos y chicas, a socializarse en definitiva. Con el deporte aprendes que el trabajo mejora el resultado.

¿Y a los jóvenes que no lo son?
Porque han buscado otro método de diversión y su grupo de amigos tampoco. El deporte no tiene que ser un objetivo profesional sino una forma sana de divertirte. El que lo hace profesionalmente es porque se ha dado cuenta de que lo lleva en los genes y tiene la posibilidad de ganarse la vida con mucho trabajo realizando lo que le gusta.

¿Qué puede aportar el deporte a la sociedad?
El deporte ayuda a trabajar en equipo, a planificar las cosas, a ser constante, a ser solidario y ayudar a un compañero en un momento determinado, a soportar el dolor, a superar la derrota, en definitiva está lleno de valores y el que no lo ve así recurre a la trampa, a valorar más otras cosas que su propia capacidad

¿Qué le saca de sus casillas?
Una injusticia.

¿A qué dedica su tiempo libre?
A montar en bicicleta, a ir al cine, a estar en familia, a tomarme algún fin de semana de vacaciones activas, y a poco más, cuando competía leía un libro a la semana, ahora hace muchas semanas que no leo un libro.

En Pozuelo ha encontrado...
En 1984 un pueblo donde formamos una familia Pauli y yo, y para un ciclista que entrena 140 km diarios, me permitía salir a carreteras secundarias con mucha facilidad. Hoy es una gran ciudad donde ya cuesta mucho más salir en bicicleta pero es de los pocos sitios de los alrededores de Madrid donde todavía se puede a través de Boadilla, Majadahonda y Brunete. Espero que no se pierda esta posibilidad y que se mejore con carriles bici.

¿Qué le pediría a los políticos que gobiernan nuestro municipio?
Que piensen que la sociedad avanza incrementando las zonas de recreo, facilitando la utilización de los medios de transporte no contaminantes, entre ellos el uso de la bicicleta y como consecuencia de estas nuevas infraestructuras limitar en ciertas zonas el uso de vehículos a motor.

¿Qué tipo de actuaciones concretas les reclamaría para el ciclismo?
Carriles bicis, señalización de carreteras secundarias... Pozuelo es un municipio extenso con muchas urbanizaciones y núcleos donde todos tenemos que ir a los bancos, tiendas, etc& sería ideal que siguiendo el modelo de algunas ciudades de Europa: Holanda, Alemania, Bélgica y en algunas ciudades de Francia, Italia, Austria, & se pudiese ir a hacer los recados y las pequeñas compras en bicicleta.

¿Qué le hace feliz?
Poca cosa, un domingo típico por ejemplo, salgo por la mañana a realizar 3 o 4 horas de bici (120 km), hasta la Cruz Verde por pueblos como Quijorna, Navalagamella, Fresnedillas y Zarzalejo. Cuando llego con un buen apetito, si hay comida familiar una buena paella. Después un poco de siesta y por la tarde, me gusta ir al cine con la pequeña Sandra (12 años) Ruth y Edi (23 y 20) ya tienen novio/a y van por libre aunque a veces vienen.

¿Cuál es su asignatura pendiente?
Quizá me planteo intentar montar un equipo ciclista profesional ya que llevo 5 años con un grupo de ciclistas jóvenes de la Peña Ciclista que lleva mi nombre y algunos ya han llegado por edad y me gustaría darles yo mismo esa continuidad. Aunque estamos en pleno cambio en el modelo de legislación sobre el deporte el futuro próximo atraerá mucho más a los jóvenes deportistas y a las empresas que querrán realizar su publicidad a través del ciclismo, un deporte lleno de valores y que transmite muchas sensaciones al espectador en las grandes etapas.

Y para terminar, ¿diría que su vida va sobre ruedas?
Sigue sobre ruedas ya que tengo previsto para este verano dos Campus de Ciclismo en Rascafría de 4 días cada uno, del 2 al 6 y del 8 al 12 de agosto, donde por las mañanas se realizan rutas de mtb y carretera y por las tardes un ciclo de conferencias de nutrición, mecánica, medicina deportiva, etc.. También me gustaría formar una escuela de ciclismo de mountain bike en Pozuelo para fomentar esta actividad poco desarrollada en el municipio.

 

 

 

 

Íntimo y personal.

Una causa por la que luchar: justicia
Un paisaje: montaña
Una comida: arroz a banda
Un libro: Los renglones torcidos de Dios
Un defecto: ser un idealista
Una virtud: constancia
El mejor premio: Premio 7 Estrellas de Madrid 1990
Un reto: aportar algo positivo a la sociedad
Un secreto: trabajo
Un complejo: no creo tenerlos