37514_16162009115425.jpgAntes de venirse a vivir a Pozuelo, Rosario Pardo ya conocía el municipio. Ahora, después de cuatro años residiendo aquí, asegura estar encantada con la decisión que tomaron.

Su trabajo en "Fugadas" y en la serie "Doctor Mateo", como la tía Juana, le obliga a estar viajando de Madrid a Lastres. Pero ella, que adora el silencio, la tranquilidad y sus momentos de soledad, parece haber encontrado en Pozuelo lo que necesitaba para estar, sencillamente, en la gloria.

Usted y sus compañeros de "Doctor Mateo" han tenido la culpa de que muchos llegáramos a trabajar los lunes con un poquito de sueño. ¿Por qué tienen que poner siempre las buenas series tan tarde?

Los actores en ese sentido somos el último eslabón de la cadena. De todas formas tiene el prime time de 10 a 11 y media. Recuerdo otras series más tardías...

Rodar en San Martín del Sella, o sea, en Lastres, habrá merecido el esfuerzo.

La verdad es que tiene los inconvenientes de rodar en un pueblito perdido pero, por otro lado, cuando nos juntamos parecemos un colegio, en el sentido de que estamos muy contentos. Además, cuando terminas de rodar tienes una estupenda playa al lado. Yo me suelo ir al bosque que es estupendo porque sientes la soledad y es muy gratificante. Nos lo hemos pasado muy bien porque nos llevamos muy bien y está resultando muy divertido hacerlo.

Tengo entendido que ya están preparándose para grabar nuevos capítulos. ¿Para cuando su emisión?

Sí, ya estamos rodando en Lastres, lo que sucede es que yo subo cuando tengo los días de descanso en el teatro. Imagino que la serie volverá a la parrilla en otoño.

¿Cómo lleva lo de andar de acá para allá?

Pues los dobletes los suelo llevar bastante mal. Físicamente me canso mucho y también tengo una familia que de pronto dejas abandonada seis meses y al niño prácticamente no le veo... pero bueno, son cuestiones circunstanciales.

Además, está usted representando "Fugadas", con María Galiana, en el Teatro Bellas Artes de Madrid. ¿Se va a prorrogar?

Todavía no sabemos si prorrogaremos dos semanas más. La gira empezaría el 28 de agosto, con bolos hasta que dure.

Dicen que la crisis no se nota en los teatros y que el público acude quizá más que en otras ocasiones. ¿Comparte esta impresión?

Nosotros de público estamos triunfando. Decían que este año el teatro ha ido mejor, que en tiempos de crisis la gente se suele reunir más y salir menos, pero para nosotros este año ha ido fantásticamente bien.

Repasando su extensa actividad profesional, ¿ha logrado llegar donde quería?

Como en esta profesión nunca me he planteado dónde quería llegar yo simplemente voy seleccionando entre lo que me van ofreciendo. He tenido mucha suerte, digo yo, porque tener la oportunidad de hacer el papel de la tía Juana... (tía del Doctor Mateo). Lo acepté porque que te ofrezcan un papel como éste de una mujer, más o menos de mi edad, independiente, y que tiene su negocio, su forma de pensar... pues siempre es apetecible. Este papel me parecía curioso y eso es lo gratificante, porque me permitía otro ritmo. Ese tipo de contraste me interesaba mucho.

Trabajar en "Fugadas" con María Galiana también debe de ser un lujo.

María y yo nos conocíamos, porque las dos venimos de Sevilla, y ha sido como un encuentro muy gracioso de amigas. Nos llevamos muy bien y tratamos todos los días de ayudarnos y eso es muy importante. María es una tanqueta. Tiene una resistencia alucinante.

Muchos actores destacan el teatro como el lugar ideal para desarrollar su profesión...

29295_16162009115439.jpgEso es verdad. Yo, por ejemplo, vengo del teatro independiente. Era una época muy difícil pero también éramos muy jóvenes. Con 25 años trabajas 27 horas al día; con 45, eso ya tiene que estar supermedido porque la resistencia física ya no es la misma. Yo, ahora, trato de llevar mi casa lo más ordenada posible, porque tengo un niño aún pequeño, e intento que todo gire en torno a la función de teatro porque necesito descansar. Además soy bastante independiente y necesito mis momentos de soledad.

¿Cómo aterrizó en Pozuelo?

Nos veníamos a vivir a Madrid y tenía una amiga médico en Pozuelo. Como teníamos que buscar colegio para el niño al final, hace cuatro años, nos vinimos aquí y la verdad es que estoy encantada. Vivo bastante cerca de la naturaleza y de Madrid.

¿Le permite su trabajo disfrutar del municipio?

Yo soy bastante de bicicleta con lo cual en Pozuelo estoy encantada. Me bajo la riberita del río hasta Aravaca y hay montón de kilómetros para hacer horita y media de bici con mi hijo.

Esa zona me encanta porque aún está medio asalvajada, tiene unos árboles centenarios maravillosos y hay cantidad de parques. Pozuelo es para mí, ahora mismo, estupendo y también para el niño, que tiene al lado el colegio, sus amigos, todas las posibilidades que quieras. Además, estoy encantada porque no tengo que coger el coche; lo tengo clarísimo, con el Cercanías en 15 minutos estoy en Atocha. Este pueblo, para mí, ahora mismo está siendo la gloria.

Para algunos el tráfico, los atascos, es lo peor de Pozuelo. Y usted ¿Qué mejoraría?

Yo, el ruido. Siempre busco sitios apartados. El hecho de que haya un cortacésped funcionando a las cuatro de la tarde no lo entiendo, no se respeta en general en España, aunque parece que ahora se está controlando más. Eso sí que lo tendríamos que cuidar, lo del ruido. Porque además se supone que éste es un pueblo tranquilo...

¿Se siente cómoda a pesar de la popularidad cuando pasea por el municipio?

Sí, la gente es muy respetuosa. Se nota que está acostumbrada a ver gente popular, porque aquí hay mucha.

 

Muy breve:

 

  • Defínase: Valiente.
  • En un hombre admira... El sentido del humor.
  • Y en una mujer... La organización.
  • ¿Qué destacaría de sus amigos? La comprensión y la paciencia.
  • De usted no le gusta... Mi forma realista y cruda de ver las cosas.
  • ¿Qué momento del día prefiere? Las mañanas temprano y el final de la tarde, cuando todo se prepara para el silencio.
  • ¿Qué le hace feliz? Viajar y descubrir lugares y formas de vivir nuevas.
  • Lo que más teme es: La enfermedad larga, para mí o para mis seres queridos.
  • Le hubiera gustado ser... Arqueóloga, pianista, aviadora, incluso perito agrícola.
  • ¿Qué le pone las pilas? Mi hijo, mi Manuel, un buen proyecto de trabajo, un buen plan de viaje...
  • ¿Qué se las descarga? La desilusión.
  • ¿Un rincón para esconderse? Un sitio de España medianamente virgen.

Texto: Isabel González del Vado.