Información general

Las ayudas y subvenciones son incentivos económicos muy atractivos para un emprendedor, pero en ningún caso deben considerarse como una fuente básica de financiación. En el caso de cumplir los requisitos necesarios para su concesión, rara vez financia el 100% del proyecto, por lo que se debe contar con alguna otra forma de financiación propia o ajena.

También hay que tener en cuenta que entre la solicitud de la ayuda y el ingreso del dinero puede pasar un largo periodo, por lo que con frecuencia se debe realizar la inversión antes de recibir la ayuda.

Debe estudiar detenidamente las bases y los requisitos de la ayuda. En ocasiones se exigen tanto en el momento de la solicitud como con posterioridad. Su incumplimiento puede conllevar la devolución de lo cobrado.

Hay que tener en cuenta que el proyecto no debe depender de la consecución de las ayudas solicitadas ya que no existe la seguridad de que se vayan a obtener, además de que continuamente se están creando nuevos programas o ayudas que se unen o sustituyen a los ya creados, por lo que es muy importante solicitar asesoramiento.

 

 

Conceptos subvencionables  

 

Cada programa suele definir los conceptos que se consideran subvencionables, si bien lo más frecuente es que dichos programas traten de cubrir en parte la inversión realizada.

Algunos de los factores que se valoran a la hora de concederlas son la contratación de desempleados o la modernización de las empresas.

Los tipos de ayudas varían según el programa de que se trate, pero las más frecuentes son las siguientes:

  • Subvención a fondo perdido, calculada a partir de los conceptos subvencionables.
  • Subvención financiera, consistente en la bonificación del tipo de interés de los préstamos obtenidos para la ejecución del proyecto.
  • Formación gratuita de los empleados implicados en el proyecto.
  • Apoyo técnico durante la planificación y ejecución del proyecto.

 

Documentación necesaria  

Cada programa de ayudas indica el tipo de documentación que es preciso presentar y el plazo existente para ello. Es importante analizar bien este aspecto ya que un defecto de forma (falta de documentación) puede hacer que la empresa en cuestión se quede fuera del programa.

En general, los documentos que suelen exigirse son:

  • Modelo normalizado de solicitud.
  • Memoria descriptiva y presupuesto del proyecto.
  • Certificado de estar al corriente de todas las obligaciones fiscales y de Seguridad Social.
  • Documentación identificativa del solicitante (DNI o estructura de constitución).
  • Declaración sobre otras ayudas o subvenciones solicitadas a efectos de concurrencia.
  • Certificación del nivel de empleo de la empresa (TC1 y TC2).

 

Tramitación de la solicitud  

La solicitud debe presentarse en el plazo señalado en el programa de que se trate y en el lugar o lugares indicados, acompañando toda la documentación requerida.

La Administración analiza la documentación y, en el caso de que ésta sea incompleta, requiere al interesado para que en el plazo de diez días aporte los documentos que faltan.

A continuación, se analizan los expedientes y la Comisión de evaluación del programa selecciona los que serán subvencionados.

Las fases que se desarrollan hasta el cobro de la subvención son las siguientes:

  • Publicación de la Orden en el Boletín correspondiente (BOCM, BOE).
  • Entrega de la solicitud y documentación requerida en el plazo establecido en la Orden de subvención.
  • Proceso de subsanación donde se le solicita al potencial beneficiario aquella documentación no presentada o se le requiere que la amplíe.
  • Realización del pago.
  • Justificación del empleo de los fondos percibidos.