Valvanuz Sánchez de Amoraga (Se abre en ventana nueva)Si alguien en este momento puede estar usando su firma en perjuicio mediante la falsificación, el llenado de espacios en blanco o la adulteración de lo ya escrito, que relaje el pulso para dar paso a la acción. A modo de film y al más puro estilo "Sherlock Holmes" sin pipa y sombrero, pero con el ojo en la enorme lupa, Sánchez de Amoraga protagoniza la búsqueda en la gráfica de las huellas de un delito porque "somos como escribimos".

Temas tan actuales como el análisis de la letra del Cuco en el caso "Marta del Castillo" para televisión o por encargo judicial denotan la profesionalidad y responsabilidad social, como perito calígrafo, que ejerce esta pozuelera, castiza de nacimiento y autóctona en su devoción. Quinta de cinco hermanos, no sólo ha nacido en Pozuelo sino que ha convertido a este municipio en el escenario de su crecimiento y desarrollo personal y profesional.

Tras su paso por la formación reglada en el Colegio San José Cluny, Valvanuz siempre ha tenido claro su fin, significado éste de su nombre, de origen cántabro. "Decidí estudiar psicología porque me gusta el trato personal. Poder ayudar a los demás me hace sentir útil", afirma la protagonista. Porque Sánchez de Amoraga es sobre todo, psicóloga, pilar sobre el que ha construido su especialización, grafología, para ejercer su perfil multidisciplinar en la Clínica Betancourt (Avenida Dos Castillas 9).

Ya sea pastosa, retardada, pausada, complicada, sobrealzada... cualquier tipo de letra manuscrita por los pacientes permite a la profesional analizar la forma "a través de la combinación de procedimientos lógicos y técnicos con base empírica, porque el peritaje caligráfico es una ciencia" para explorar el contenido "puesto que, cuando pido a un paciente que escriba sobre su problema inicia la redacción con una letra ejemplar pero al ir avanzando desaparece la floritura para dar paso a la verdadera identidad. Esto me permite el análisis superficial, a priori, y profundo, a posteriori".

Sin duda "somos como escribimos porque con nuestra letra mostramos lo que somos, qué buscamos, nuestras carencias y virtudes", añade la experta, ora psicóloga para los pacientes, ora especialista en el estudio gráfico (el dibujo) para el trato con niños, ora detective de la gráfica. Es más, en esta última faceta, Valvanuz está capacitada para emitir un dictamen que adquiera categoría de prueba judicial. Para muestra "es muy interesante poder conocer mediante la letra a Einstein, su sencillez en la firma, pequeña y sin florituras, que refleja un hombre humilde y evolucionado. El punto de la "i" adelantado, en su firma, delata una personalidad pionera".

Sánchez de Amoraga y Gómez Acebo es un libro que rebosa letra en teoría y práctica. Su experiencia formativa a caballo entre la Universidad ICADE-ICAI de Madrid o la Universidad de Barcelona;  y pericia, desde la alta dirección de Recursos Humanos en la empresa privada, como psicóloga en diferentes Hospitales de la CAM o profesora de Grafología en el Espacio Cultural MIRA, delatan su propia personalidad: observadora, ordenada, disciplinada y perfeccionista.

Pero además, rebosa gracia y sobre todo si les interpreta la firma. Cualquier rúbrica es suficiente para describir un perfil humano. Eso sí, siempre lejos de creer que estamos delante de cualquier pseudo-profesional, Valvanuz es una científica.

Texto y fotografía: Irene Lema