Juan Valderrama (Se abre en ventana nueva)Juan Valderrama es el depositario de un tesoro cultural, de una parte de la historia del flamenco que por razones obvias conoce de primera mano a través del gran maestro que fue su padre. Hijo de Juanito Valderrama y Dolores Abril, este joven artista, cuenta con una consolidada carrera musical y con un estilo propio que fusiona las raíces andaluzas con las nuevas tendencias. Tras debutar con el disco "La memoria del agua" (2002), que contó con la colaboración de Vicente Amigo y Ana Belén, desarrollar su faceta de cantautor con !Alfileres" (2004), dar rienda suelta a su arte con "Ilusión" (2006) y "Moderna Tradición" (2009), ahora con "Sonidos Blancos" nos endulza con su propia personalidad, sin renunciar nunca a sus orígenes flamencos.

El 20 de octubre se sube a las tablas del MIRA Teatro para sorprendernos con su espectáculo. Aficionados y principiantes del flamenco disfrutarán por igual de esta música abierta y universal que muy pocos conocen como él.

 
Hijo de Juanito Valderrama y Dolores Abril. ¿Cómo ha influido su infancia en su vocación musical?

En la normalidad, en mi familia se vive de la música desde siempre y no es nada extraordinario, sino que nos lo tomamos como un oficio. Claro está que es especial pero no dejamos de ser una familia de lo más normal y mi niñez fue la de cualquier chiquillo que va al colegio, juega, hace travesuras... La profesión de tus padres influye, pero no definitivamente, de cinco hermanos que somos, cada uno tiene su propia vocación.

Cuando tomó la decisión de dedicarse a la canción, ¿Qué le aconsejaron en su casa?

Cuando terminé Periodismo me di cuenta de que esa no quería que fuese mi vida, que quería cantar. Mis padres creyeron en mí y me apoyaron desde el principio, sin ese empujoncito, quizás no me hubiese atrevido a coger una maleta y venir a Madrid en busca de una oportunidad.

¿Su apellido le ha abierto las puertas o al contrario, ha tenido que esforzarse más en demostrar su arte?

Las dos cosas. Al principio gozas de oportunidades gracias a tu nombre, pero luego toca defender ese apellido y reivindicarte todos los días. Igual que el hijo del jefe tiene que pasar un examen diario, yo también tengo que demostrar que sigo ahí porque el público quiere, no por llamarme como me llamo.

Antes de dedicarse al mundo artístico se licenció en Periodismo, faceta que combina con la música. ¿Es importante para cualquier artista la formación universitaria?

No lo sé, quizás hubiese sido más productivo aprender a tocar el piano, o la guitarra, ir al conservatorio... Lo bueno del periodismo es que te da una culturilla, te enseña a comunicarte con la gente, a tomarle gusto a la lectura y eso siempre viene bien en la vida.

Juan Valderrama (Se abre en ventana nueva)Desde niño ha vivido la historia del flamenco y de la copla y sin embargo, ha apostado por el pop andaluz. ¿En qué se diferencia de las primeras?

Yo paso de etiquetas, soy músico, en un principio iba por los caminos de la fusión y hoy en día alterno esa faceta con el flamenco por derecho, que para mí es la madre de todo el folclor popular andaluz y de la copla. Y no sé decirte qué estaré haciendo dentro de dos años porque me gusta vivir el momento y no hacer muchos planes.

Aún así, encontramos en sus discos la huella de los géneros clásicos!

Musicalmente, uno es lo que escucha y lo que ha "mamao" desde la cuna, en mi caso está claro que el flamenco es mi fuente y donde me encuentro más a gusto.

Ha dicho que ha pasado de la época de querer ser un cantante famoso a querer ser un buen artista. ¿Es ésta, quizás, una de las equivocaciones de los artistas fugaces?

No, es el pecado de la juventud, pero la vida se encarga de enseñarte algunas cosillas que te hacen madurar y ser más, como decirlo, selectivo. Ya no busco tanto la cantidad como la calidad.

Tras diez años en la música y cinco discos en el mercado, podemos disfrutar de su quinto trabajo "Sonidos Blancos". ¿Qué significa para usted este último trabajo?

El equilibrio entre dos mundos musicales como el flamenco y la nueva copla. La crítica ha dicho de "Sonidos Blancos" que es cante de caramelo o la voz de miel del flamenco...

¿Estamos ante un Juan Valderrama maduro o inquieto, que busca nuevos retos?

Todos necesitamos nuevos retos, no sólo los artistas, hay que buscarle siempre un aliciente nuevo a la vida, un motivo extra para seguir luchando, aprendiendo. Sólo se vive una vez, hay que tenerlo siempre presente.

Actúa en Pozuelo de Alarcón el 20 de octubre, ¿Además de mucho sonido blanco habrá alguna sorpresa?

Nunca sé exactamente lo que voy a hacer, me gusta dejar margen a la improvisación, así que seguramente las habrá.

Disfrutaremos de su espectáculo en el MIRA, un Teatro municipal por el que han pasado grandes artistas como Antonio Carmona y 13.000 espectadores en la última temporada. ¿Es bueno que se abra la cultura a los municipios y no sólo se queda en la capital?

Es de agradecer y yo desde estas páginas quiero hacerlo. Gracias por darnos trabajo a los artistas en estos tiempos tan difíciles, en mi nombre y en el de toda mi gente; músicos, técnicos, chófer, secretaria... todos. El trabajo es una bendición siempre, pero hoy en día más si cabe.

Pozuelo de Alarcón es un municipio tranquilo y próximo a la capital. ¿Le gusta vivir retirado de la gran urbe o prefiere estar en contacto con la ciudad?

Me gusta el campo, la naturaleza, me crié entre naranjos en un pueblo de Sevilla. No me gusta el cemento ni el alquitrán, así que si me dieran a elegir entre la capital y un pueblo, siempre elegiría un pueblo como Pozuelo.