Ramón García es vecino de Pozuelo desde hace más de una década. Hace unos días nos recibió en los estudios de Punto Radio, emisora desde la que cada día dirige Las Tardes de... Ramón García, y nos contó cómo y por qué disfruta tanto de su trabajo y de su familia, a la que no deja de mencionar en ningún momento. Ramón García dice vivir Pozuelo de principio a fin, especialmente sus parques. En Nochebuena cenará con su familia en Pozuelo y en Nochevieja estará en la Puerta del Sol, como en los últimos 11 años, pero esta vez retransmitiendo las campanadas con Antena 3 TV.
Texto: Isabel González del Vado.

Le hemos reencontrado en Antena 3 TV con ¿Sabes más que un niño de Primaria? ¿Está aprendiendo mucho?
Prácticamente todo, porque hay muchas cosas que yo ni las había estudiado y otras que se nos olvidan. Creo que ésa es la base del concurso.

¿Ha pensado alguna vez que no le gustaría verse en el pellejo de los concursantes?
Yo sería un mal concursante. Imagino que tendría que utilizar todas las chuletas rápido. Así como mi mujer es buena, yo no soy más listo que un niño de Primaria; se lo aseguro.

Gracias a este programa está siendo un testigo directo de lo que saben nuestros niños, ¿cómo valora el nivel académico de los escolares?
Los cinco niños que tengo en el programa son un poco especiales porque tienen más facilidad que otros para estudiar. Yo creo que los niños en Primaria, en general, sí tienen un buen nivel.

Entre los objetivos de La Tarde de... Ramón García, en Punto Radio, está el dar prioridad a temas sociales con especial atención a la preadolescencia y adolescencia.
Tenemos una hora que se llama La Merienda donde los chavales son los protagonistas. Es una sección muy especial porque cuando viene un invitado ellos son los que entrevistan y las experiencias siempre han sido buenísimas. Es un compromiso mío personal que algunos tacharon de arriesgado cuando lo propuse pero poco a poco estoy demostrando que a los niños hay que tratarles como a personas mayores porque son pequeños de tamaño pero no de cabeza.

Además, tiene un aliciente, cuando a veces vienen políticos y no te atreves a hacer algunas preguntas ellos lo hacen con tal naturalidad que todos contestan.

Por otra parte, aunque sólo sea desde un punto de vista egoísta, si los jóvenes no se enganchan a la radio, dentro de un tiempo... Las radios generalistas van perdiendo audiencia, porque ese trasvase de la radio musical a la radio generalista no existe. Hay que intentar engancharles.

¿Cómo valora, en general, la atención que prestan las cadenas de televisión en sus parrillas de programación a los espectadores más jóvenes y, especialmente, a los niños?
Lo de los niños es una cosa nefasta. Yo lo hablo siempre aquí cuando vienen los políticos e intento que retomen esa firma que se hizo con la Vicepresidenta del Gobierno y con todos los directivos de las televisiones de crear un horario protegido pero todo sigue igual. Un niño, a las cinco o seis de la tarde debería poder ver la tele, sin embargo, no hay más que hacer un zapping por todas las cadenas y comprobar que los programas que se emiten no son adecuados para ningún niño.

La culpa es de los share (audiencia)...
Sí, efectivamente. La tarde tiene en los últimos años un componente de corazón, de sucesos y de historias inadecuadas para los niños. Yo recuerdo con cariño que, cuando era crío, por las tardes yo veía Los Payasos, Un globo, dos globos, tres globos, etc. Hoy en día ningún chaval te puede decir en conjunto un programa que destaque, como podemos decir los de nuestra generación.

Luego la televisión no es mala en sí, aunque los expertos inciden mucho en que no es bueno que los niños la vean durante mucho tiempo...
Estoy absolutamente seguro de que la televisión es uno de los mejores medios que existen. Poder ver cualquier cosa en tu pantalla, de cualquier lugar del mundo es un lujo maravilloso. El problema es el de siempre: ¿qué contenidos volcamos en la televisión? Esa responsabilidad es, sin duda alguna, de los directores de las cadenas y de los programadores; ellos son los que tienen que hacer un análisis y decir, señores, esto no podemos ponerlo. Pero la espada de Damocles del share hace que cuando un programa funciona, sea lo que sea, esté en las pantallas.

Vd. inició su andadura profesional en la radio. Ahora está trabajando en este medio y en la televisión. ¿Tendría claro con qué medio se quedaría si tuviera que elegir?
La radio, sin duda. Yo empecé en el 84 en la radio, lo que pasa es que la gente me ha conocido por la televisión, que es lo que te hace ser popular. Pero yo soy un hombre de radio.

¿Siente que ha hecho ya el programa de su vida o aún lo está esperando?
Yo nunca pienso "me falta hacer esto" o "me gustaría lo otro" porque sino sería infeliz. Yo siempre soy feliz con lo que hago en cada momento y por eso disfruto de mi vida y me lo paso muy bien.

En otro orden de cosas, ¿por qué eligió este municipio para establecerse?
Cuando decidí instalarme en Madrid, Pozuelo lo conocía un poco por TVE, en Prado del Rey. Pozuelo me gustaba porque lo veía verde. Yo que soy de Bilbao echaba de menos el ambiente ese de pueblo y me decidí por Pozuelo. Luego me casé y a mí mujer también le encantó y ahora, con las niñas, pues felices.

¿Se puede decir que usted vive Pozuelo?
Vivo Pozuelo. Voy de compras por Pozuelo con mi mujer, paseo con mis niñas por Pozuelo, los fines de semana voy con ellas a los parques de Pozuelo. Creo que vivo Pozuelo bastante. Sigue manteniendo ese ambiente de pueblo donde te puedes tomar una caña en un bar y al día siguiente encontrarte a la misma persona con la que coincidiste y saludarte, como vecinos, algo que en las grandes ciudades ha desaparecido.

¿Hay algún sitio en particular que le guste especialmente?
De Pozuelo me gustan todas las zonas verdes, porque es lo que echaba de menos en Madrid. Tiene unos parques estupendos que además se han mejorado mucho últimamente. Es una gozada llegar y ver todo bonito; es la sensación de vivir en un pueblo donde se está a gusto; es un pueblo muy limpio donde se puede compartir la vida con la familia y con los vecinos de alrededor y eso es muy difícil de conseguir en otros sitios.

¿Vd. es de los que cuando sale de casa se fija en si las calles están limpias, los jardines en condiciones o prefiere obviar estos asuntos?
Sí, sí, yo me fijo en todo, hasta en el mobiliario urbano, las farolas, etc. Es más, yo soy de los que llamo al Ayuntamiento si veo que se ha estropeado algo. Creo que eso es ser ciudadano.

¿Se atrevería a dar una puntuación al municipio?
Yo a Pozuelo, del 1 al 10, le daría un 8 alto. Más no porque si no se relajaría el señor Alcalde -sonríe de nuevo-. Además sólo hay que recorrer otros sitios de alrededor para ver que tu localidad es estupenda.

¿Qué es para usted la calidad de vida?
Pues es no tener mucho ruido, respirar aire puro, etc., y eso en Pozuelo se consigue, además de estar a un paso de la capital. Pozuelo tiene buenos accesos a nivel de carreteras. Como es lógico cada vez somos más y hay más tráfico, creo que el metro ha desahogado mucho. Aquí se puede salir a dar un paseo, sentarte a tomar una caña con tu familia y amigos y además, tener cerca tus tiendas, una gran superficie, etc. Yo a Pozuelo lo he visto crecer porque cuando yo empecé aquí no había nada de eso; he visto incluso cerrar la M-40. Ahora te metes en atascos que no pertenecen a Pozuelo, sino a la gran mayoría de personas que circulan por ella. Por cierto, hay que arreglar una rotonda.

Dígame usted cuál.
La última hacia el Puente de los Franceses. Se han hecho las otras dos, para el Metro, pero la última que es la que confluye con la carretera de Húmera, es la que hace el tapón. Mire usted por dónde, tenía ganas yo de decirlo.

Pues nada, me alegro de que se haya quedado usted contento. Por cierto, ¿dónde pasará las Navidades?
En Nochebuena nos juntamos en mi casa las dos familias, la de mi mujer y la mía, y la Nochevieja, como en los últimos 11 años, la pasaré en la Puerta del Sol, en esta ocasión retransmitiendo las campanadas con Antena 3 TV.

¡Vaya! ¿Y ya sabe por quién va a estar acompañado?

Pues sí, por Anabel Alonso, una estupenda compañera como todas las que he tenido en estos años.