La cultura del puro es una filosofía de vida
Jesús Fernández-Montes (Se abre en ventana nueva)Si Sara Montiel fumaba esperando al hombre que más quería, de Jesús se puede decir que espera sin fumar al cliente que más le aprecia. Porque cuando se habla de Gourmet, es tan apreciado el producto como el profesional del mismo. Y en este caso, Jesús y el cigarro puro son dos en uno.

Texto e imagen: Irene Lema.

Si la experiencia avala el conocimiento, Jesús es un sabio del puro, ya que sus más de 33 años de dedicación concluyen, a priori, en La Cava de Somosaguas. Situado en Avenida de Europa, este espacio de exquisiteces pureras es más que un estanco de concesión. Además de la oferta del producto convencional, este pozuelero castizo supo dar a su negocio una bocanada de aire fresco despalillando el distinguido mundo de los puros para hacerlo atractivo a fumadores y no fumadores. La Cava, situada dentro del Estanco, ejemplifica el dicho, ya que, a modo de Galera (nombre que reciben las salas, en el interior de las fábricas, donde se elaboran los cigarros puros), aporta al comprador de Jesús un distinguido olor para el olfato y una histórica visión para el ojo.

Desde un ambiente húmedo, idóneo para la conservación del puro, una ornamentación de coleccionista, como una réplica de mesa de cortador, autóctona de las zonas pureras que recorrió Jesús mientras ejerció como representante internacional de Tabacalera, hasta puros de todos los tamaños, colores, olores y procedencias, convierten a este Estanco de Pozuelo en un museo digno de visitar para los detractores del humo y digno de admirar para los consumidores del puro.

Sin duda el lugar está hecho al dueño y el dueño se dedica en cuerpo y alma a sus clientes porque "el mundo del comercio se ha vuelto ingrato y creo que es fundamental atender al cliente personalmente, asesorarle en su compra o interesarse en cómo resultó la compra anterior", afirma el protagonista. "Cualquier sector especializado requiere una atención personalizada y, en este caso, la oferta contínua de todo tipo de puros y a tiempo real es un valor añadido del que cuido hasta el último detalle. Sin más, el dato que reafirma mi teoría es que la mayor parte de fumadores de puros no lo son de cigarrillos".

Cuadros de personalidades fumando puros en compañía de Jesús o una exposición de los puros de Franco, los consumidos por la Casa Real, los de Felipe González y el propio Aznar, además de ser, estos últimos, clientes de la Cava, confirman el nivel de especialización y conocimiento de este abogado de formación y experto trabajador curtido en Altadis (la antigua Tabacalera). Sin ir más lejos, "he impartido varios cursos de conocimiento y cata de puros para el personal de la Casa Real", añade.

Pero cuando la pasión y la profesión se aúnan, la Cava se queda pequeña y Jesús alza el vuelo para difundir la cultura purera. Por ello, no es de sorprender su hallazgo en todo lo relacionado con la ciencia del cigarro puro "ya sean Conferencias y Catas de puros, entre otras". "Muchos de mis clientes son además amigos porque no sólo compartimos una afición sino una filosofía de vida cuyo conocimiento intentamos sea extensible a todos los públicos y en colaboración organizamos eventos temáticos del puro".

Entre sus amistades y colaboraciones, cuenta el restaurador Urrechu, cuyo establecimiento hostelero está situado en Pozuelo y con el cual organiza de vez en cuando Cata de Puros, como si de vino se tratara. Y aprovechando los conocimientos, Jesús recomienda tanto a usuarios como aficionados del puro "nunca tener prisa cuando se fuma un puro, se saborea el humo en el paladar pero nunca se inhala porque hay que disfrutar de los distintos matices de la hoja y por supuesto, nunca se inunda de humo al acompañante porque fumar sin un uso racional perjudica seriamente la salud". Una sabia afirmación.